El Hospital Monte Naranco, del Servicio de Salud del Principado de Asturias, y la ONG Médicos del Mundo, organizan cada año los Premios Virgilio Palacio, con los que se pretende recordar la dimensión científica y humana del doctor Virgilio Palacio, uno de los profesionales más relevantes en el terreno de las patologías de transmisión sexual, con reconocido prestigio nacional e internacional.
Este año el jurado ha decidido otorgar el “Premio Virgilio Palacio al Programa de intervención o a la investigación científica en el campo de las ITS en general, así como, en particular, en el VIH/SIDA y procesos relacionados (tanto en el ámbito clínico como en el sociosanitario)” al trabajo titulado “Información sobre la prevención del VIH en poblaciones vulnerables. Propuestas para la comunicación en prevención”, firmado por Mercedes García Ruiz del Área de Promoción de la Salud y Participación, de la Consejería de Salud y Servicios Sanitarios del Principado de Asturias.
El jurado ha valorado la metodología de investigación-acción- participación, en donde la población diana se convierte en sujeto activo para la elaboración de los materiales destinados a la prevención del VIH.
Y el “Premio Virgilio Palacio a la persona, equipo o asociación que se haya destacado por su trayectoria en actividades relacionadas con la intervención a favor de la inclusión social en salud” ha sido concedido este año a la Fundación Siloé. El jurado ha valorado la intervención en colectivos vulnerables, la diversificación de sus actuaciones, el trabajo en red con otras asociaciones a nivel local y regional, así como su dilatada trayectoria. En ambos la decisión ha sido unánime.
Los premios serán entregados esta tarde en el salón de actos de la sede de Cajastur, en Oviedo, por la Consejera de Bienestar Social y Vivienda, Noemí Martín, y el Consejero de Salud y Servicios Sanitarios, Ramón Quirós.
Virgilio Palacio, médico dermatólogo asturiano, profesionalmente vinculado al Hospital Monte Naranco, socio y voluntario de Médicos del Mundo, y presidente de la Fundación Anti-SIDA de España, dejó huella por su perfil humanitario, social y solidario.
El Premio que lleva su nombre fue implantado con el objeto de mantener vivo y promover en el ámbito de los servicios sanitarios y sociales el modelo de comportamiento personal y de desempeño profesional que definió a Virgilio Palacio.
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