Elena Espinosa valora positivamente el anticipo del pago único como apoyo para el sostenimiento económico de las explotaciones agropecuarias españolas

La Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, ha intervenido hoy en el Congreso donde ha manifestado su satisfacción por la decisión de la Comisión de la Unión Europea de permitir el anticipo de pago único, destacando su importancia como herramienta para el sostenimiento económico de las explotaciones agropecuarias españolas.


Elena Espinosa ha recordado que ya en el mes de mayo el Gobierno, consciente de la situación que atravesaba el sector en la campaña, empezó a trabajar y planteó a la Comisión la posibilidad de realizar un anticipo, un planteamiento al que se fueron sumando otros Estados Miembros con el fin de facilitar la liquidez de las explotaciones, consiguiéndose, el pasado 21 de septiembre, que el Comité de Pagos Directos, reunido en Bruselas, aprobara una Decisión para la realización del pago anticipado a 10 países incluido España.
De esta forma, ha señalado la Ministra, el sector agrario español va a disponer, desde el próximo 16 de octubre, de un montante de 1.700 millones de euros a repartir entre agricultores y ganaderos, lo que les permitirá disponer de parte del importe de los derechos de pago único, para hacer frente tanto a los episodios catastróficos ocurridos en diversas zonas de nuestra geografía, como a la crisis económica y financiera, ofreciendo un horizonte de estabilidad.


En este sentido, Elena Espinosa ha indicado que, si bien la última palabra en la realización del anticipo lo tienen los gobiernos autonómicos, que son los que deben aplicarlo en sus territorios, desde el MARM, junto con las CC AA, se están realizando la oportuna coordinación para la ejecución del pago, con el fin de que se haya verificado el cumplimiento de las condiciones de admisibilidad para percibir la ayuda por parte de los beneficiarios.


Con ello, ha concluido la Ministra, el anticipo supondrá un apoyo incuestionable a la renta de los agricultores y facilitará el normal desarrollo de la campaña con independencia de la volatilidad de los precios o los vaivenes del mercado.