Hijas de la minería

OPINIÓN

Por Luis José de Ávila

Periodista

Un año más, como hace muchos, unas cuatrocientas ex alumnas de la Escuela de Formación Profesional femenina Santa Bárbara en Soto del Barco se reunieron en dicha localidad para recordar tiempos y rezar ante la imagen de Santa Bárbara ahora situada en la iglesia de esta localidad.
Son las hijas de la minería, llegadas de todos los puntos de Asturias, incluso de fuera de ella, que recuerdan así su años de infancia y también les sirve para mantener un contacto personal a lo largo de la vida. Estas mujeres estudiaron en su juventud en esas escuelas que dependían de la extinta Caja de Jubilaciones de la Minería. Sus padres, mineros, o habían fallecido en accidente o pasan por dificultades familiares. Las escuelas eran llevadas por monjas de la orden de San Francisco Javier. Aún cada año vienen dos de sus antiguas cuidadoras desde Barcelona. Tras la misa en la iglesia de Soto del Barco, comida de hermandad en el hotel Palacio de Villa Magdalena cuyo propietario, el constructor Tascón, ha conservado el edificio original donde se ubicaron las escuelas mineras, lugar desde el que se divisa una magnífica vista con la desembocadura del río Nalón al fondo. Cada año, con motivo de esta reunión, se producen escenas emotivas al reencontrarse amigas y antiguas compañeras de clase y es que además estamos ya en vísperas de la festividad de Santa Bárbara, patrona de los mineros y de los artilleros, que como todos los años será muy celebrada en las cuencas mineras asturianas.
De aquella Caja de Jubilaciones queda hoy, por sí decirlo, la Mutualidad de la Minería, o Montepío minero, como se le conoce popularmente, y que siendo de carácter voluntario cuenta en la actualidad con casi 17.000 afiliados e instalaciones lúdicas y asistenciales en el Balneario de Ledesma (Salamanca), Roquetas del Mar (Almería) y Los Alcázares (Murcia) así como está terminando de construir una gran residencia asistencial para la tercera edad en Felechosa (Aller).
El Montepío de la Minería, que este año con motivo de Santa Bárbara, entregará su medalla de oro al SOMA-FIA-UGT con motivo del centenario del mismo, está presidido por José Antonio Postigo quien de unos años para acá en que desempeña el cargo ha impulsado muy positivamente al mismo con una gestión eficaz y competitiva manejando unos fondos cercanos a los treinta millones de euros. Como bien dice el propio José Antonio Postigo el Montepío y Mutualidad de la Minería Asturiana es un símbolo de la Asturias obrera y en su gestión se demuestra lo eficaz que siempre resulta remar en la misma dirección, esto es, que tanto el SOMA-FIA-UGT como CCOO y los Cuadros, representados en la comisión regional que rige en el montepío, actúen conjuntamente con el objetivo de mejorar cada día más este organismo que está al servicio de los mineros y sus familias y que tan buena atención les presta.