entrevista al Presidente del Principado de Asturias en el programa “Hoy por hoy” de la Cadena SER, que conduce Carles Francino (
28 de octubre de 2010
La autopista del mar entre Gijón y Nantes es un buen regalo de despedida antes de dejar la Presidencia del Gobierno, porque hubo algún intento previo de conseguir este proyecto y no se logró hasta ahora
“Efectivamente. Hubo un intento que se hizo a mediados de los años 90. Como Ayuntamiento participamos, pero era el Principado quien lideraba y no pudo ser el Gijón-Lorient. Y no pudo ser por lo que ahora permitió que fuera viable y es que necesitaba ayudas públicas en el proceso de arranque. Y como saben, la Unión Europea fundamentalmente la Competencia, exige que esas ayudas de Estado tengan una finalidad específica y que estén autorizadas por la Comisión Europea. Se ha conseguido, hemos trabajado mucho y finalmente el proyecto arranca. Es un proyecto fantástico dentro de las políticas marítimas que se impulsan en la Unión Europea y donde efectivamente estas autopistas del mar conectan “interland”, conectan puertos pero esos puertos tienen al lado un “interland” muy influyente. El nuestro llega incluso a la zona de Castilla y León. Captamos tráficos en otras zonas y lo mismo pasa con la conexión de Nantes-Saint Nazaire, que es un es un proyecto de futuro muy ligado a la creación del puerto de Gijón y muy ligado a la Zona de Actividades Logísticas que es clave de futuro. Por tanto, muy satisfecho”.
¿Qué prioridades tiene el Presidente en su agenda para los meses que le quedan de Legislatura?
“Primero, cerrar el presupuesto de 2011, que es un elemento de estabilidad y necesario. Un presupuesto muy complicado en términos matemáticos. Yo el otro día en una entrevista con un colega suyo lo calificaba “tan difícil como resolver la conjetura de Poincaré”, uno de los problemas del milenio. Esto de hacer presupuestos con menos dinero que el año anterior y encima sostener los servicios públicos de Sanidad, de Educación, la Ley de Dependencia, etc. Créanme que es difícil de resolver, pero lo haremos también.
A parte de esto, yo creo que grandes proyectos que culminan y que, sinceramente, para mí es una satisfacción ver cómo se plasman es la finalización de la gran obra portuaria de El Musel, que permite no sólo nuevos tráficos, sino nuevos espacios industriales, conexiones como esta que hablamos. Hay otra gran obra que es el Hospital Universitario Central de Asturias que va a cambiar el modelo de gestión en el conjunto de la sanidad asturiana, pero que también será un hospital sin papeles, el más moderno en nuestro país y una gran inversión de futuro.
También el Centro Cultural Internacional Óscar Niemeye, en Avilés, una obra fantástica y un centro de referencia internacional. La culminación también de algunas obras muy importantes. La concertación social que en Asturias funciona desde hace 12 años. Ayer hacíamos la evaluación y yo creo que todo el mundo ve que se ha cumplido. Y cumplir en estos momentos con inversiones tan importantes como lo que en este año 2010 afecta Asturias, que son 960 millones de euros que vamos a licitar”.
La concertación social funciona en Asturias o en Castilla y León, mientras que en España “estamos como estamos”…
“Aquí yo creo que se ha basado en la experiencia, porque antes de ser Presidente, he estado doce años de Alcalde de Gijón. La concertación social en Asturias la iniciamos en el periodo de las grandes crisis de los años 80 y 90. Fue un elemento decisivo para superarlas. Compartes áreas de gobierno con los agentes sociales y empresariales. Planificas mejor, te equivocas menos. Y yo creo que hay una experiencia amplísima en Asturias que ha dado muy buen fruto”.
Presidente, “¿está de retiro?”
“No, yo no me retiro. Yo cambio de ciclo. Ahora iniciaremos una nueva actividad. Doce años de Alcalde, doce de Presidente, antes de ser Alcalde estuve también en Educación tanto en Asturias como en Madrid y ahora empezaré una nueva etapa en mi vida. Hasta que me muera, voy a seguir activo en la vida política. Se puede estar en muchos lugares e incluso, desde el punto de vista individual, ser una persona que contribuya a mejorar la sociedad en la que vives. El otro día me preguntaba Juan Ramón Lucas cuál era la salida natural después de estos años. Bueno, pues yo no es que sea natural, es que es obligada. Yo soy profesor de la Universidad y cuando culmine esto, el día “D +1” tendré que estar en la Universidad pero haré muchas más cosas”.
¿Volverá a las clases?
“No lo sé muy bien. Yo ese día tengo que reintegrarme pero luego la vida se abre con muchas expectativas. Yo me siento bien, quiero estar activo y sinceramente no sé lo que voy a hacer pero seguro que haré muchas cosas”.
Forma parte de dos colectivos a los que cuando les miramos desde fuera parecen robots. Es usted político y es profesor de matemáticas. Pero hace un par de semanas se emocionó usted en el Debate de Orientación Política. Como Moratinos, que también se emocionó al dejar el Ministerio. Es decir, que al final los políticos también tienen su corazoncito…
“Es que el que no tenga corazón y emociones no está vivo. En la vida, yo tengo muchísimas emociones y satisfacciones, al lado también de momentos muy duros. Pero nunca he visto una contradicción con mi vocación matemática. Este sitio donde estamos, el Antiguo Instituto Jovellanos, es de una gran tradición ilustrada por la que pasaron profesores y grandes personalidades a lo largo de más de dos siglos abundantes. Esta sala donde estamos es y era el salón de actos. Aquí estudié yo siete años de mi vida. Aquí hubo profesores de matemáticas que fomentaron esa vocación y que nunca fue contradictoria con la política. Si la ciencia tiene algo en común con la política es la capacidad de transformación de la vida. Y eso no culmina hasta que te mueres, hasta que es el fin de tu ciclo biológico. Para mí siempre ha sido complementario. Creo que mi formación matemática o científica ha sido una ayuda y una herramienta para tener una visión del mundo determinada y poder gestionar desde lo público, de modo eficaz, los recursos que tenemos”.
Ahora seguro que puede responder con un poco más de libertad y claridad la siguiente pregunta: ¿Le llegaron a ofrecer ser Ministro de Trabajo?
“No me lo han ofrecido. Hubo muchos rumores, no sé si hubo movimientos, pero a mí no me lo han ofrecido. Objetivamente, yo anuncio que no voy a presentarme a las próximas elecciones porque saben que el Partido Socialista en sus estatutos tiene que los que gobiernan son candidatos naturales si ellos lo desean. Y quien desee presentarse tendría que ir a unas primarias. Yo he decidido no presentarme después de un ciclo tan dilatado y porque además en la vida hay que renovar. Aquí en Gijón, tras doce años de Alcalde y en un buen momento político, decidí también dar ese paso.
A partir de ahí, la gente presume que tengo mis planes y una de las que decían era acceder a un Ministerio. Lo agradezco en lo que supone reconocimiento de un trabajo. Pero también es verdad que aquí tenemos que culminar esta legislatura, que es muy complicada, que tenemos unos meses para las elecciones, faltan apenas siete meses pero son siete meses durísimos, hay que hacer esta remontada y, en estos momentos, me siento útil en Asturias y quiero acabar esta legislatura.
Ahora mismo se está produciendo en el Congreso un cara a cara entre la portavoz parlamentaria del PP, Sainz de Santamaría, y el nuevo Vicepresidente Rubalcaba. Y creo que los pronósticos se cumplen y dan una idea de lo que viene, por el tono y nivel de dureza de la dialéctica
“El Gobierno de Zapatero con este cambio ha ganado en comunicación, ha ganado en proyección y defensa de sus políticas. Tiene que explicar a la ciudadanía por qué se toman medidas difíciles en momentos difíciles y también tiene que explicar el balance de que cuando las cosas iban mejor, se mejoró mucho. Y desde el punto de vista social, yo creo que hay bastantes justificaciones de por qué deben aspirar a seguir gobernando. Yo creo que hay pelea y batalla todavía. Las encuestas dicen un estado de opinión en un momento dado, pero las encuestas evidentemente cambian y esas cocinas que actúan con la fidelidad de voto pueden cambiar a lo largo de los meses”.
¿El PSOE le teme a Álvarez-Cascos si acaba siendo candidato?
“Sinceramente no, por dos razones. Primero, porque no creo que vaya a ser candidato. Y segundo, porque cuando podía serlo no lo fue y en esos momentos estábamos claramente por encima de él en cuanto a expectativa de voto”.
En su época de estudiante en Santiago fue un líder estudiantil y estaba en movimientos de protesta. ¿Hoy estaría en la calle con la que está cayendo?
“Encuentro legítimo que algunos colectivos se manifiesten porque es verdad que están sufriendo una situación difícil, pero al mismo tiempo yo creo que mantendría la esperanza porque tengo experiencia y compromiso para que esta situación cambie porque lo hemos conseguido en el pasado en condiciones más duras. Hemos resistido mejor y estamos más preparados que en el pasado para superar esta crisis”.
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