El Presidente de la Federación Española de Hostelería y Restauración, Rubio Marín, ha remitido una carta al ministro Miguel Sebastián en el que argumenta las razones por las que se oponen a la prohibición de fumar en los establecimientos hosteleros.
El texto
Desde la Federación Española de Hostelería y de las 75 asociaciones que la forman nos vemos obligados a poner en su conocimiento que las empresas de este sector están pasando los peores momentos de los últimos 50 años. Quizás esté ya al tanto, pues son datos estadísticos del INE, de que las ventas de bares, restaurantes y cafeterías llevan ya 30 meses consecutivos de caída y que la media de pérdida de ventas acumulada desde 2007 supera el 15 %. Los más perjudicados son los locales de ocio nocturno y las microempresas de bares y restaurantes, en los que la crisis se está cebando, con pérdidas de ventas que superan ampliamente el 25 %. Por si fuera poco, la caída de facturación, que venía desacelerándose, se ha agudizado en los últimos meses, con tasas interanuales que han pasado del -2,5% al -4,6%. Es decir, que hemos vuelto a ir de mal en peor. Decenas de miles de pequeñas empresas están en pérdidas y están al borde del cierre.
A esta terrible realidad de la crisis se ha añadido en los últimos meses la amenaza de las graves pérdidas adicionales para la economía y el empleo del sector que podrían producirse si finalmente se lleva a efecto la propuesta del Grupo Socialista y de IU y ERC para que se imponga en España la prohibición total de fumar en todos los establecimientos de hostelería, sin excepción alguna, a través de la Proposición de Ley para la modificación de la ley de medidas sanitarias frente al tabaquismo que actualmente se está debatiendo en el Senado.
A través de las encuestas realizadas entre los clientes y la información recabada por empresarios asociados a las 75 asociaciones que integran la Federación Española de Hostelería, se constata que la prohibición total tendría como consecuencia una menor frecuencia de visitas en un porcentaje importante de clientes y una reducción del tiempo de su estancia, provocando una caída de ventas que en los restaurantes se situaría en torno a un 7 % y en los bares y cafeterías entre un 10% y un 15%. Para los locales de ocio nocturno se señala un impacto negativo del 20 %.
Enormes pérdidas
Para evitar estas enormes pérdidas y al mismo tiempo avanzar en la lucha contra el tabaquismo, la Federación Española de Hostelería ha pedido a los grupos parlamentarios que, en línea con la legislación mayoritaria en la Unión Europea, incorporen una enmienda a la Proposición de Ley, por la que se permita a los establecimientos de hostelería habilitar zonas para fumar, con un máximo de superficie del 30 % de la del local, completamente compartimentadas y con sistemas eficaces para la eliminación de humos. En estas zonas no se prestaría servicio a los clientes por parte de los trabajadores y estaría prohibida la entrada de menores.
Con esta propuesta se da una solución completa a los tres problemas básicos aducidos por Sanidad y los Grupos Socialista y de IU y ERC para proponer la modificación de ley: la protección efectiva de los menores, el derecho a la salud de los trabajadores y el derecho de los no fumadores a espacios libres de humo en todos los establecimientos de hostelería.
Falsedades
Frente a las falsedades que con intención torcida se han difundido incluso desde entornos oficiales, tenemos que subrayar que esta medida de permitir zonas para fumar en los establecimientos de hostelería está en vigor en 24 de los 27 países de la Unión Europea que han rechazado la prohibición total de fumar por su radicalidad y alto coste para el sector y el conjunto de la economía. Son países como Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Holanda, Italia, Polonia, Portugal, Suecia, y así hasta completar los 24, son sociedades avanzadas de los que no se puede decir que no les importe la salud pública. El propio Ministerio de Sanidad se ha visto obligado a reconocerlo finalmente en un informe sobre derecho comparado enviado a los miembros del Consejo Interterritorial de Sanidad.
Sólo tres países lo prohiben
Sólo en tres países de la U.E. se ha impuesto la prohibición total de fumar, Irlanda (2004), Reino Unido (2008) y Chipre (2010), donde se han producido grandes pérdidas en los bares, restaurantes, como se refleja en sus estadísticas oficiales.
Es evidentemente falso que la prohibición total se quiera imponer para, como se ha dicho, igualarnos con Europa. Como es falso también que en 2012 la Comisión Europea vaya a imponer por Directiva la prohibición total de fumar en todos los países miembros.
¿Cuántas falsedades y mentiras vamos a tener que soportar?
Si con las zonas para fumar, medida ampliamente mayoritaria en la Unión Europea, se da solución a los problemas sanitarios que justifican la modificación de la ley y se evitan pérdidas en la hostelería, ¿Por qué el Gobierno y el Partido Socialista sigue empeñados en imponer la prohibición total? ¿Quieren una ley contra el tabaquismo o contra la hostelería?
En la modificación de la ley, el Ministerio de Sanidad y los Grupos Socialista e IU y ERC han asegurado, e incluso ampliado, los puntos de venta del tabaco para evitar que el Estado no sufra un recorte de ingresos fiscales por la prohibición de la venta de tabaco en los bares. ¿Por qué no han tenido la misma atención con los ingresos legítimos y necesarios de las empresas y no les importa que se vayan a la ruina?
Hoy estamos ante su Ministerio la Junta Directiva de FEHR, en representación de todo el colectivo de empresarios de la hostelería de España, para pedirle que ejerza su responsabilidad como Ministro de Turismo, del que forman parte muy importante nuestras empresas y que, atendiendo a nuestras demandas, intervenga ante el Gobierno de España y el Partido Socialista, a fin de que en la modificación de la ley del tabaco se evite la prohibición total, como se ha hecho en la mayoría de los países de la Unión Europea, y se acepte la excepción de zonas reducidas para fumar, que dan solución a los problemas sanitarios, suponen un cambio sustancial respecto a la situación actual y no llevan a la ruina a la hostelería.
El sector de restauración está integrado por 350.000 establecimientos de bares, restaurantes, cafeterías, ocio nocturno y actividades similares, que generan un empleo directo de más de 1.200.000 de puestos de trabajo y que contribuyen a la economía de España con un 6 % del PIB.
La prohibición total de fumar podría llegar a causar unas pérdidas del 10 % de nuestra actividad, lo que supondría una pérdida del 0,6 % del PIB de España.
¿Cómo puede ser que, en medio de la terrible crisis que estamos sufriendo no quiera pensarse en eso y no importe si la prohibición total vaya a causar más daño y más desempleo?
Quedando a la espera de que nos informe del resultado de sus gestiones, le envío un cordial saludo,
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