El subdirector general de Planificación e Infraestructuras Científicas y Tecnológicas (ICTS) del Ministerio de Ciencia e Innovación (MICINN), José Doncel; la jefa del Departamento de Medioambiente y Recursos Naturales de la Subdirección General de Proyectos de Investigación del MICINN, Lourdes Armesto; el general Jefe de la Fuerza Logística Terrestre Nº 2, Alberto Corres; y el comandante Jefe de la Base Gabriel de Castilla, Jose Lupiani, han presentado hoy en la Universidad Politécnica de Valencia la XXIV Campaña Antártica 2010-2011, que se dio por iniciada el pasado 10 de noviembre con la salida en Cartagena del Buque de Investigación Oceanográfica Las Palmas.
La Campaña Antártica 2010-2011 constará en esta edición de 16 proyectos de investigación que involucrarán a 53 investigadores -48 de ellos españoles- y aproximadamente a 20 instituciones. El Ministerio de Ciencia e Innovación destinará para su financiación 3,7 millones de euros del Plan Nacional de I+D+i. Además, el MICINN ha destinado en esta edición 5,3 millones de euros para las instalaciones antárticas españolas. Así, la Campaña Antártica 2010-2011 contará con una financiación total del MICINN por valor de 9 millones de euros.
Tal como ha explicado la jefa del Departamento de Medioambiente y Recursos Naturales de la Subdirección General de Proyectos de Investigación del MICINN, Lourdes Armesto, de los 16 proyectos de la Campaña Antártica 2010-2011, 13 de ellos se desarrollarán íntegramente en instalaciones españolas y los tres restantes en instalaciones de otros países. Uno de estos proyectos –que utilizará logística española- se desarrollará en las bases de Chile y Brasil y los otros dos se desarrollarán en una base de Nueva Zelanda.
La mayoría de los proyectos de investigación que se recogen en esta edición engloban áreas como la biología, la geología, la vulcanología, la sismología, la meteorología o el cambio climático. Entre los proyectos destaca, por ejemplo, el estudio de la composición genética de la comunidad de virus de los lagos de la península Antártica, que permitirá observar como los virus de la Antártida han evolucionado de forma independiente del resto de los virus del planeta, adaptándose a condiciones ambientales extremas. Esta adaptación puede tener un importante interés biotecnológico para el futuro. Por otra parte, entre las novedades de este año destaca un proyecto que se centra en estudiar los mecanismos de detección de las presas por parte de pingüinos, sentando las bases fisiológicas que permitan la localización de zonas de alimentación por los pingüinos.
El grueso de la actividad investigadora en la Antártida se desarrolla siempre coincidiendo con el verano austral. Para ello, en esta edición las bases se abrirán en diciembre y se cerrarán en marzo.
En la presente campaña participarán unos 70 investigadores o técnicos, lo que implicará unos 180 movimientos de personal gracias al Buque de Investigación Oceanográfica (BIO) Las Palmas. Además, se realizarán 3 vuelos adicionales entre Punta Arenas y la Antártica para traslado de personal, implicando el traslado de unos 50 investigadores o técnicos. En total se trasladará hasta las bases 20 toneladas de material científico y unas 30 toneladas de material técnico para desarrollar con éxito todos los proyectos científicos.
El BIO Las Palmas tiene previsto regresar a Cartagena el 18 de abril de 2011, tras navegar una distancia total equivalente a una vuelta y media al mundo, y cruzar en diez ocasiones el mar de Hoces, famoso por ser una de las zonas más tormentosas del mundo. El barco salió de Cartagena el pasado 10 de septiembre y en él operan 35 marinos.
Bases Antárticas Españolas
Esta es la primera edición que la Base Antártica Española Gabriel de Castilla, situada en la Isla Decepción, operará al 100% de sus posibilidades después de las obras de remodelación de la pasada campaña que se realizaron para mejorar las condiciones de vida y trabajo de los investigadores así como para buscar una mayor eficiencia energética y un menor impacto ambiental. Dichas obras fueron financiadas por el Ministerio de Ciencia e Innovación por valor de 1,1 millones de euros que incluyeron los gastos de transporte de equipos y materiales necesarios. Por su parte, el Ejército de Tierra – encargado de la gestión de la Base- aportó la redacción del proyecto, la dirección técnica, el nuevo módulo y el personal necesario para su montaje con los costes asociados. En la Base trabajan 12 militares españoles.
Por otra parte, la otra Base que España tiene en la Antártida, la Juan Carlos I, sigue en remodelación gracias a los 11,5 millones de euros que el Ministerio de Ciencia e Innovación ha destinado a tal fin.
Importancia de la cooperación
Para lograr el éxito de la investigación polar el Ministerio de Ciencia e Innovación colabora estrechamente con la Unidad de Tecnología Marina del CSIC (que gestiona la Base Antártica Juan Carlos I y coordina toda la logística de la campaña) y con el Ministerio de Defensa (a través del Ejército de Tierra -que gestiona la Base Antártica Gabriel de Castilla- y de la Armada -que opera el Buque de Investigación Oceanográfico Las Palmas-).
En este sentido, el subdirector general de Planificación e Infraestructuras Científicas y Tecnológicas del MICINN, José Doncel, ha querido señalar la excelente colaboración que mantienen el Ministerio de Ciencia e Innovación y el Ministerio de Defensa para la realización de la investigación polar española. Una relación que se consolidará en los próximos meses con la firma de un protocolo de colaboración entre ambos ministerios que permitirá ordenar y formalizar la relación de cooperación para lograr el éxito de los programas científicos polares.
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