Los reyes y el presidente del Gobierno se reunirán con el Papa durante su visita a España

María Teresa Fernández de la Vega, mantuvo hoy un encuentro en el Vaticano con el cardenal Tarsicio Bertone, en el que abordaron, entre otros temas, los detalles de la próxima visita del Papa a España, los próximos días 6 y 7 de noviembre. Posteriormente se informó de que los reyes y el presidente, José Luís Rodríguez Zapatero, se reunirán con Benedicto XVI durante su visita pastoral a Barcelona, el día 7 de noviembre. La propia vicepresidenta, acompañada de los príncipes de Asturias, también se reunirá con el Papa el día 6 en Santiago de Compostela.

En el encuentro celebrado esta mañana con el Cardenal Bertone, también se intercambiaron posiciones sobre otros asuntos de índole internacional, como la "muy positiva" colaboración de la Iglesia para la liberación de presos políticos cubanos que, según indicó, "está dando muy buenos resultados".

Preguntada por los medios de comunicación, la vicepresidenta Primera también se refirió a otras cuestiones, como la convocatoria de huelga general, el próximo día 29. La Vicepresidenta señaló que el Gobierno aborda la situación desde la "responsabilidad y el respeto".

Según dijo, el Gobierno tiene la obligación de garantizar, de una parte, el ejercicio del derecho de huelga y, por otra, el derecho de las personas que quieran acudir a su puesto de trabajo. Desde esta óptica, el Gobierno está "trabajando para que la jornada pueda discurrir con normalidad".

Por último, en relación a la banda terrorista ETA, la vicepresidenta reiteró que "la posición del Gobierno de España es clara". "No hay ninguna vía que no sea la de esperar al fin definitivo de la violencia. No hay otro camino, sino que ETA abandone de forma definitiva y clara las armas y ponga fin a la violencia", apostilló.

La vicepresidenta hizo extensivo este mensaje a Batasuna, "un partido ilegal que también sabe muy bien que el único camino que hay es la separación, la ruptura y la condena total de la violencia". "No hay ningún planteamiento que no sea el fin absoluto de la violencia", concluyó.