Haciendo patria en Torremolinos

OPINIÓN

Por Luis José de Ávila

Periodista

He tenido ocasión de asistir a la fiesta de Asturias en el Centro Asturiano de Málaga que tiene su sede en Torremolinos y preside el langreano Florentino Martínez Roces. Esta embajada de Asturias en el corazón de Andalucía cuenta con trescientos socios y su domicilio social está en un edificio de planta baja en el recinto ferial de Torremolinos que les ha sido cedido por cincuenta años por el ayuntamiento, encantado éste con las numerosas actividades lúdicas y culturales que los asturianos allí afincados llevan a cabo.
En esta ocasión el pregón de las fiestas, muy emotivo y asturianista, corrió a cargo del presidente de la Asociación Amigos de Cudillero, Juan Luis Alvarez del Busto, quien acudió al frente de una expedición de cincuenta personas entre las que figuraban los miembros del coro Roballera que desde hace unas fechas cuenta con un nuevo director, el pixueto Angel Fernández Pola, quien le está dando mucha vivacidad y garra a las actuaciones.
El acto de asturianía se celebró en el centro cultural Pablo Ruiz Picaso presidido por la concejala del ayuntamiento de Torremolinos Encarnación Navarro Ruiz en ausencia del alcalde, el popular Pedro Fernández Montes, tras una recepción en el ayuntamiento donde la concejala recibió de la expedición de Cudillero una reproducción de un palangranero que borda, precisamente, un artesano de Lastres.
Como no podía faltar el Centro Asturiano de Málaga cuenta con escuela de gaita y tambor. Una jovencita no asturiana y de madre belga, por cierto, Carina, es la maestra de la gaita pese a su juventud. Lo suyo fue un flechazo al primer toque cuando de cría vio actuar en la tele al gran gaitero asturiano Hevia. Durante el acto, en el que también actuó el grupo andaluz Solera de Alhaurin de la Torre, el presidente del Centro Asturiano entregó la insignia de oro del mismo a Rosana Sande por su permanente colaboración con la entidad, hija del que fuera jugador argentino del Real Oviedo y del Málaga. Sande, que desgraciadamente murió joven, ya retirado del fútbol, se casó en Oviedo y ahora su viuda e hijos viven en Torremolinos muy integrados en el Centro Asturiano.
En el acto hizo de presentador el mierense Ricardo Tomillo que lleva toda la vida en esta parte de Andalucía y entre el público, por cierto, estaba el directivo del Real Oviedo Ataulfo que todos los años por esta fechas pasa una temporada en Torremolinos, localidad en la que vivió muchos años su padre como comerciante.
Al día siguiente, bollo y vino en la sede social con cerca de trescientas personas degustando una buena fabada made in María Aurora, una guisandera avilesina que lleva ya seis años al frente del restaurante del Centro Asturiano de Málaga. Aquí también se encuentra la sede virtual de la Agrupación Langreanos en el Mundo que preside el propio Florentino Martínez Roces. Ya tienen socios en los cinco continentes. El vicepresidente es Dionisio Fernández durante años presidente del cetro Asturiano de Bruselas y que se acaba de jubilar como funcionario del Parlamento Europeo. me manda saludos para Laura González con la que trabajó, y muy a gusto, me dice, durante dos euro legislaturas.
Pero como los asturianos estamos en todas partes no me sorprendo encontrarme con el felguerino Ramiro Gago, un destacado empresario de la restauración en Marbella, quien dirige el grupo “Los Cuarentunos”, unos tunos, si señor, de más de cuarenta años que haciendo un alto en sus profesiones -médicos, abogados, periodistas, empresarios, etc.- se dedican a actuar en fiestas recordando los tiempos de la universidad. Actuaron a los postres y al personal le caía las lágrimas escuchando un popurri de canciones asturianas, “Asturias, patria querida” incluida.
El Centro Asturiano de Málaga se salió de la federación Internacional de Centros Asturianos (FICA) a quien acaba de otorgar el Principado la medalla de plata de Asturias. Mano larga la de Cosme Sordo, el presidente del Centro Asturiano de Madrid pero, bueno, pelillos a la mar, hay que hacer asturianía por encima de todo y Florentino Martínez Roces convence en esta visita a Torremolinos al presidente de la Asociación Amigos de Cudillero, Juan Luis Alvarez del Busto, de poner en marcha en la villa marinera una iniciativa parecida, que hay muchos hijos de Cudillero repartidos por esos mares y tierras de Dios.