Inicio obras urbanización de la Zalia

Por Vicente Álvarez Areces

Presidente del Principado (*)

Éste es un acto que recordaremos a lo largo de nuestra vida como el arranque de un proyecto fundamental para Asturias, inmerso en un análisis de lo que hoy significa la globalización y las necesidades de hacer frente a la globalización con proyectos que trasciendan el ámbito de la influencia del territorio en el que estamos, aspirando a tener una presencia en los mercados internacionales. La ZALIA supone para Asturias poder contar con la plataforma logística de referencia abriendo un espacio de nuevas oportunidades que colocan a nuestra comunidad autónoma como referente de movimientos de mercancías en el Arco Atlántico. Y también quisiera dar las gracias al Puerto de Gijón por concederme la Medalla del Puerto en el día de ayer a propuesta de su Presidente, lógicamente también con toda mi gratitud para todos los miembros del Consejo que lo han refrendado.

Muchas gracias porque esto está unido al ámbito de la estrategia que aspiramos a hacer en Asturias en el futuro. Tanto Puerto como Zona Logística –más bien puertos, ya que estamos hablando de área de influencia en un hinterland muy amplio, de los puertos de Gijón y de Avilés-, van a constituir una pieza fundamental en nuestro futuro y que aspira a intervenir en un hinterland no sólo en el territorio de España, sino también en las relaciones que podamos tener con el centro de Europa. Estamos hablando de muchos millones de ciudadanos, no sólo españoles sino europeos, con los que vamos a establecer unas nuevas relaciones comerciales a través de algo tan importante como la actividad portuaria, los tráficos marítimos. Y, sobre todo, la combinación con el transporte terrestre y el transporte por ferrocarril. Porque la logística es una de las palabras clave para el futuro de las actividades comerciales.  

Asturias ha plantado cara al actual contexto económico con la convicción de apuntalar un desarrollo sólido y definir una posición activa en las dinámicas que marcan la recuperación económica. Hemos impulsado infraestructuras que contribuyen al desarrollo industrial, energético y logístico de Asturias, que favorecen la competitividad de las empresas asturianas y hacen todo nuestro territorio atractivo para la inversión y el desarrollo de nuevos proyectos empresariales.

Y lo hemos hecho con una enorme ambición y cuando Paz, diplomáticamente, nos explicaba que en el Ayuntamiento también hubo que pelear, estaba diciendo que no todos votaron a favor. Es verdad. Y en El Musel pasó lo mismo. A pesar de la incomprensible actitud de algunas fuerzas políticas, que estuvieron bombardeando los principales proyectos con los que va a tener que hacer frente Asturias a su futuro, nosotros, como es normal, cuando se impone la razón, la tenacidad y cuando se pone la voluntad política y las prioridades presupuestarias, salimos adelante. Y nos sentimos muy orgullosos porque trabajamos por el interés general de nuestra Comunidad y de nuestro país. Este es un proyecto que va más allá de lo que significa un proyecto logístico para Asturias, es un proyecto logístico para España y para Europa. Y por eso las autoridades europeas lo han valorado.

La crisis financiera internacional ha puesto en evidencia la gran interdependencia en la que hoy viven los mercados, tanto como que son las empresas que han conquistado posiciones de competitividad por calidad y garantía de suministro en tiempo y forma las que mejor han respondido a la actual situación económica. Es necesario superar la dependencia en exclusiva de mercados locales. Lo que hace décadas era un reto que sólo estaba a la altura de unas pocas multinacionales, hoy es una oportunidad que, en situaciones de disminución del consumo interno, permite a muchas pequeñas y medianas empresas mantener producción y salvar su cifra de negocio. Pero no podemos asegurar la internacionalización comercial sin las infraestructuras necesarias para una comercialización eficiente y en condiciones competitivas de los productos y mercancías de nuestra economía.

Infraestructuras como las que hemos impulsado estos años en Asturias. Porque sí, estamos en crisis y vivimos las consecuencias de la crisis, pero nos hemos preparado para ello. Porque hemos trabajado juntos desde la concertación social con los agentes empresariales y sociales, con los Ayuntamientos, con los agentes más activos de nuestra Comunidad para buscar un futuro y estar preparado para ello. Y por eso hoy estamos mejor preparados de lo que estuvimos nunca para hacer frente a esta situación.  Hemos conectando las áreas industriales y empresariales, extendiendo la infraestructura de fibra óptica, comprometiendo la finalización de las autovías del Cantábrico y Oviedo-La Espina –que aún con lo que significa esta última ralentización creemos que con todo ello, y a pesar de haber sido una noticia no agradable, pero si una noticia que nos permite garantizar la finalización de esas obras aunque sea en un plazo un poco más largo del que esperábamos; pero están ahí, son absolutamente irreversibles-. También hemos asegurado la variante ferroviaria que salva la cordillera para el transporte de mercancías, las mejoras del aeropuerto y la mejora de la línea de FEVE. Hemos conseguido la ampliación de nuestros dos puertos comerciales y la primera autopista del mar operativa entre Francia y el Norte de España… Y, por supuesto, esta iniciativa que hoy arranca, la Zona de Actividades Logísticas de Asturias, en plena área central, en donde se incrusta el motor de nuestra economía.

No ha sido poco. Han sido ingentes inversiones, preparándonos para situaciones como esta. Y eso hubiese sido imposible si no hubiese habido una voluntad política clara y, sobre todo, una identificación con las políticas que se estaban abriendo camino en Europa, donde, sinceramente, en muchas ocasiones hemos ido por delante.

Las actividades logísticas son esenciales en el desarrollo económico de cualquier territorio, porque el transporte y la logística son factores de primer nivel en las estrategias de competitividad de cualquier empresa, ahora y en un futuro inmediato. Cuando el precio de los carburantes está volviendo a incrementarse, las empresas tienen que replantear las estrategias de transporte y movimiento de sus mercancías, en busca de menores costes y mayor eficiencia. No es una preocupación nueva. Hace tiempo que dentro de la política de transportes de la Unión Europea es una prioridad avanzar hacia sistemas de transportes con menor dependencia de los hidrocarburos y más sostenibles.

Asturias es una de las regiones europeas que en mayor medida ha incorporado esa concepción del transporte impulsada por la Unión Europea, apostando por el transporte marítimo y el servicio de la autopista del mar entre Gijón y Saint Nazaire. Una autopista de mar que ha sido, no diría yo un sueño, sino una obsesión. Tengo en mi mente lo que significó aquel Gijón-Lorient que impulsó el Principado hace años y que no fue posible, porque quizás no había todavía condiciones para establecer un apoyo político y público sólido desde el principio de las líneas que suelen ser deficitarias y que ahora, retomando ese proceso, fuimos impulsando en un camino muy complejo de negociaciones, de impulso de esta línea que finalmente la Comisión Europea acepta porque no vulnera la competencia, porque dos países apoyan públicamente en los primeros años de andadura la línea y porque hay operadores de primer nivel que la están realizando. Por cierto, con gran éxito en los inicios de la línea. Un hinterland nuevo que se abre a un mercado de más de 160 millones de personas tanto en el área de la península como en el área europea. Y, sinceramente, creo que es algo que interconecta los puertos con el área logística intermodal y también con las ciudades y el área central asturiana.

Ayer la UTE Dique Torres entregaba la obra de ampliación del puerto de El Musel ya concluida. Otra batalla difícil y compleja por la que no todos apostaron. Conviene que los ciudadanos tengan memoria, porque esa obra si se terminó fue porque desde la Autoridad Portuaria el Consejo de Administración y también desde el Gobierno de Asturias se estimuló el proyecto, y particularmente me siento muy orgulloso de haber impulsado todas las iniciativas que condujeron a que todo eso fuese una realidad. Porque hubo momentos donde la hostilidad hacia la obra y el interés de echarla abajo fue tan intenso que si no hubiese sido por una actitud nuestra de todo orden y en todos los ámbitos, tanto en el español como en el europeo, esa obra probablemente no hubiese acabado.

Y si no hubiese acabado habría sido un verdadero desastre para nuestra comunidad. El nuevo Musel es una infraestructura clave para el desarrollo industrial y económico de Asturias al reforzar la capacidad comercial de las empresas asturianas en el escenario de la globalización y la creciente importancia del transporte marítimo. Esa ampliación abre nuevas perspectivas para el sector energético; no es solo una obra portuaria, es una obra que crea nuevos espacios portuarios, permite atraques en puertos, en seguridad, de buques que nos van a permitir conectarnos con todo el mundo, pero también es un espacio industrial en el que han tenido lugar actividades e instalaciones por las que hemos luchado y hemos tenido que conseguir primero la inclusión en el Plan Estratégico de las perspectivas que nos permitían que una planta de regasificación tuviese presencia y viabilidad en el puerto, constituyendo una red que, además, tiene vida por sí misma, unida a lo que pueden ser los futuros ciclos combinados, algunos de ellos en marcha, y cuando se recupere la demanda energética –porque no hay que esperar que el mundo permanezca siempre en la actual situación- tenemos ahí un espacio de primerísimo nivel, de índole estratégica y, desde luego, contribuye al cambio de modelo energético que nos obliga la propia Unión Europea y el nuevo modelo de desarrollo sostenible.

No es pensable que Asturias sigua toda la vida ligada al futuro del carbón. El carbón tiene futuro y lo tiene en el mix energético. En una dimensión menor que en el pasado. También las renovables y también el gas. Porque el gas se necesita para el periodo de transición y el nuevo modelo que tenemos que elaborar en la Estrategia 2020.

El proyecto de esta obra y de esta infraestructura que hoy estamos poniendo en marcha, la urbanización de la Zona de Actividades Logísticas de Asturias, se ha desarrollado desde un punto de vista urbanístico en un tiempo récord, considerando el periodo medio de maduración de otras iniciativas comparables con esta en el resto de España. Recuerdo perfectamente cuando soñábamos con esto, cómo desplazándonos a Zaragoza veíamos su extraordinaria área logística; allí tienen el AVE pero nosotros aquí tenemos cosas más importantes que son los puertos y eso pongámoslo en valor porque esta concepción y esta integración de los sistemas son algo fundamental. Y los puertos siguen siendo, y lo serán cada día más, un elemento de primer orden para asegurar el futuro de nuestra tierra.

En un momento en el que la inversión peligra en muchos espacios de actividad, en Asturias mantenemos la confianza en nuestros grandes proyectos. No se ha parado nada y en este año, año de crisis, con un presupuesto menor que el del año pasado, hemos sabido identificar las prioridades. Lo tenemos claro. Aquí, en esta área, fíjense lo que ha simbolizado, por parte de ZALIA y de los organismos que componen el consejo de administración, hacer inversiones de en torno a 43 millones de euros con sus correspondientes avales, con la negociación de la financiación -saben las empresas que están aquí que no es nada sencillo en el mundo actual. Hoy, muchas veces casi prima más la negociación de la financiación que lo que es en sí la puesta en marcha de una obra o la complejidad de la misma-.

Pero lo hemos hecho y lo hemos hecho por la solvencia financiera del Principado y de los organismos que completan todo lo que simboliza la ZALIA, este nuevo modelo que hemos puesto en marcha. Nace de la concertación social pero, sobre todo, se aplica en tiempo real. Y además de esos 43 millones de esta urbanización, que serán más porque hay otras actividades que van a exigir más financiación, no se olviden de que nosotros en tiempo real hemos conseguido que los accesos a la ZALIA se liciten. Están ya licitados, 147 millones de euros que financia íntegramente el Principado de Asturias y que, además, tienen el reflejo presupuestario para las expropiaciones en este año. Pero no se olviden que la obra se divide en tres tramos con lo que se da más juego a las empresas, facilita la financiación de la obra y se pone en marcha de forma inmediata ya en el año 2011.

No parará, otra cosa es que nosotros hemos acordado un sistema de financiación que se dilata en el tiempo, pero la obra en tiempo real se ejecutará en el plazo previsto. Y esto no solo es un acceso a ZALIA. Es más. Porque si en Asturias hemos puesto en marcha dos autovías nuevas sobre la que teníamos, sobre la “Y”, -la autovía minera y la AS-II Gijón-Oviedo- esto que denominamos “acceso a ZALIA” no es solo un acceso a ZALIA, en los tres tramos que se van a licitar en esos 147 millones de euros, será la interconexión de toda el área central. Porque el proyecto lo hemos hecho más ambicioso y ya no solo afecta a ZALIA sino que va a intercomunicar, diríamos que da solución definitiva espero que para muchísimos años, las interconexiones del área central. Va a dar muchísima más fluidez a la AS-II y por supuesto, a la Zona Logística.

Hemos ido mucho más allá de lo que nos podía obligar el convenio que en su día suscribimos la Alcaldesa y yo mismo con el Ministerio de Fomento para los accesos a El Musel que se convierten en una prioridad absoluta. Convenio que suscribimos en el año 2005, cuyo proyecto está lanzado y que ahora es el siguiente objetivo que nos vamos a plantear porque hay posibilidades de hacerlo y, a pesar de la crisis y de las dificultades, vamos a empujar todos en esa dirección porque es prácticamente el final del remate de esta gran obra logística, portuaria, de interconexión de financiación, de inversiones fundamentales en los puertos de Avilés, de Gijón y en el área de todo el hinterland que abarca esta zona.

La ZALIA ha recibido algunos reconocimientos. Nos agrada mucho que en otros lugares, como en Barcelona, donde se celebra el Salón de Logística Internacional, haya recibido el primer premio. Y que sea el mejor proyecto logístico de este año de la VI edición del Salón Internacional de la Logística también nos dice que vamos por el buen camino.

La ZALIA es una plataforma logística multimodal de más de 400 hectáreas que hoy iniciamos con la urbanización de estas 107 en la Fase Uno. Y, como decía, todas las inversiones las hemos mantenido. Están aquí el Presidente de FADE y las organizaciones sindicales. Saben lo que significa el esfuerzo de, en un momento en el que vivimos, mantener las inversiones y los compromisos esenciales de la concertación. Y sabemos lo que esta pasando en el país, que es muy duro, pero nosotros lo hemos hecho por nuestra solvencia económica, por nuestra voluntad política y por una manera de ajustar, porque hemos ajustado, pero priorizando las cosas que tenemos que priorizar. Por ello, me siento muy satisfecho y, desde luego, reconozco el esfuerzo colectivo que todos estamos haciendo.

Esta localización permite a ZALIA posicionarse como el principal referente logístico en la cornisa cantábrica, con capacidad para establecer nuevas relaciones con el centro y el norte de Europa a través de los puertos atlánticos. Se está trabajando duro. Ahora llega un gran reto tanto para le puerto como para ZALIA que es cómo con estas grandes infraestructuras tenemos que actuar comercializando adecuadamente. En el puerto, además de los graneles, está la carga, los contenedores, el abrir camino. Abrir camino en un mundo donde se compite muy duramente por la captación de los tráficos. Y también la ZALIA tenemos que posicionarnos y hay ya muchas empresas que quieren venir.

Hoy, en España, hay dificultades, restricción en el acceso al crédito, incertidumbres y muchas empresas que tienen posibilidades y recursos se preguntan ¿dónde invertimos? Pues en áreas y zonas como esta. Esto es el futuro, aquí ahí que invertir porque el ingente esfuerzo público que se ha hecho permite hoy precisamente presentar aquí una plataforma que está en línea con los modernos proyectos del nuevo desarrollo sostenible, de lo que tenemos que hacer, de los nuevos tráficos que se tienen que originar.

Iniciada las obras de la Fase Uno, hay que concentrar el esfuerzo en operadores nacionales e internacionales, en empresas de distribución, en sectores industriales fundamentales para Asturias, y servicios ligados al área logística. Este proyecto del que me siento muy orgulloso, a lo largo de estos casi 12 años como Presidente, creo que sirve a Asturias. Y sirve a Asturias y sirve a nuestro futuro, da confianza y, sobre todo, hemos demostrado que cuando se cree en una cosa hay que luchar por ella por encima de las dificultades y por encima de todos aquellos intereses que prefieren que se hunda lo que significa progreso para Asturias con objeto de beneficiar sus propias opciones.

Pero los ciudadanos son muy inteligentes y saben distinguir el que mira por el futuro y por el interés general de aquellos intereses que, por muy partidarios que sean, nunca van a servir a ese interés general. Y el acceso al poder democrático se consigue también con alternativas, no solamente con la destrucción o la crítica de lo que otros hacen.

Asturias tiene que sentirse muy orgullosa de todas las personas y del trabajo colectivo que hemos protagonizada en esta etapa en la que nos hemos modernizado, ha cambiado el tejido empresarial industrial, tenemos grandes infraestructuras de comunicación, tenemos buenos servicios públicos y muy modernos y podemos luchar perfectamente, como hemos hecho en el pasado, porque estamos mejor preparados y porque hoy tenemos muchos más recursos para actuar ente esta situación. Enhorabuena, muchos ánimos y, a los gestores, a ponerse las pilas y a traer empresas y a traer tráficos.

(*) INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL PRINCIPADO DE ASTURIAS EN EL INICIO DE OBRAS DE LA FASE I DE LA ZONA DE ACTIVIDADES LOGÍSTICAS DE ASTURIAS