El Parlamento Europeo considera que un año después del terremoto, "la situación en Haití sigue siendo caótica, que el país se encuentra todavía en una situación de emergencia" y que la reconstrucción apenas ha comenzado. En una resolución sobre la situación actual del país caribeño, los eurodiputados subrayan la debilidad del Estado haitiano y el riesgo de que la actual crisis política pueda empeorar aún más la situación.
Los diputados consideran que "la epidemia de cólera ha puesto de manifiesto la incapacidad casi total del Estado haitiano ante una enfermedad fácil de prevenir y de curar, así como las limitaciones del sistema de ayuda internacional en un país que se beneficia de un despliegue humanitario masivo (12.000 ONG)". El texto aprobado hoy subraya, además, que "los actores humanitarios no deben ni pueden continuar compensando las debilidades del Estado haitiano ni ocupando su lugar, y que es urgente actuar por fin en materia de desarrollo a largo plazo, en particular en lo que respecta al acceso a la atención sanitaria, el agua potable y el saneamiento".
En este sentido, el Parlamento Europeo insta "al Gobierno de Haití a que mantenga y aplique los compromisos asumidos en el contexto del Plan de Reconstrucción Nacional" para aumentar la eficacia de los gobiernos locales e incorporar el concepto de descentralización política, económica e institucional.
Estabilidad y voluntad política para la reconstrucción
Los eurodiputados manifiestan también su profunda preocupación por "la crisis política actual tras los resultados de unas elecciones presidenciales y legislativas muy cuestionadas".
Por ello consideran que la UE debe hacer todo lo que esté en su mano para apoyar con fuerza un proceso electoral legítimo y transparente y el buen desarrollo de la segunda vuelta, aplazada a febrero, para evitar así que Haití caiga en una crisis aún más grave. Asimismo subrayaron que "solamente un Presidente elegido y legítimo y unos parlamentarios legítimos pueden tomar las decisiones necesarias, y que la reconstrucción requiere estabilidad y voluntad política".
Por último, el Parlamento, aunque reconoce "los esfuerzos desplegados y el trabajo realizado por las organizaciones humanitarias (Cruz Roja, ONG, Naciones Unidas) y los Estados miembros", insiste en la necesidad de comunicar sobre los efectos no visibles de las intervenciones humanitarias. Gracias a ellos, la situación se ha podido mantener bajo control (atención a heridos, abastecimiento de agua potable y alimentos, y alojamientos provisionales).
Los diputados consideran que "la epidemia de cólera ha puesto de manifiesto la incapacidad casi total del Estado haitiano ante una enfermedad fácil de prevenir y de curar, así como las limitaciones del sistema de ayuda internacional en un país que se beneficia de un despliegue humanitario masivo (12.000 ONG)". El texto aprobado hoy subraya, además, que "los actores humanitarios no deben ni pueden continuar compensando las debilidades del Estado haitiano ni ocupando su lugar, y que es urgente actuar por fin en materia de desarrollo a largo plazo, en particular en lo que respecta al acceso a la atención sanitaria, el agua potable y el saneamiento".
En este sentido, el Parlamento Europeo insta "al Gobierno de Haití a que mantenga y aplique los compromisos asumidos en el contexto del Plan de Reconstrucción Nacional" para aumentar la eficacia de los gobiernos locales e incorporar el concepto de descentralización política, económica e institucional.
Estabilidad y voluntad política para la reconstrucción
Los eurodiputados manifiestan también su profunda preocupación por "la crisis política actual tras los resultados de unas elecciones presidenciales y legislativas muy cuestionadas".
Por ello consideran que la UE debe hacer todo lo que esté en su mano para apoyar con fuerza un proceso electoral legítimo y transparente y el buen desarrollo de la segunda vuelta, aplazada a febrero, para evitar así que Haití caiga en una crisis aún más grave. Asimismo subrayaron que "solamente un Presidente elegido y legítimo y unos parlamentarios legítimos pueden tomar las decisiones necesarias, y que la reconstrucción requiere estabilidad y voluntad política".
Por último, el Parlamento, aunque reconoce "los esfuerzos desplegados y el trabajo realizado por las organizaciones humanitarias (Cruz Roja, ONG, Naciones Unidas) y los Estados miembros", insiste en la necesidad de comunicar sobre los efectos no visibles de las intervenciones humanitarias. Gracias a ellos, la situación se ha podido mantener bajo control (atención a heridos, abastecimiento de agua potable y alimentos, y alojamientos provisionales).
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