Los nuevos accesos por carretera a Soto de Ribera ya están ejecutados en un 70%

16 de diciembre de 2010

El Consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras, Francisco González Buendía, visitó esta mañana los trabajos de montaje de uno de los vanos que conforman el puente atirantado sobre el río Caudal, dentro de la obra de construcción de los nuevos accesos a Soto de Ribera. Durante el acto, Buendía afirmó que la obra ya está ejecutada en un 70% y recordó que es una actuación, con un presupuesto elevado (7,3 millones de euros), que tiene gran trascendencia para facilitar la comunicación  del concejo de Ribera de Arriba.


Durante la jornada de hoy, se está procediendo al izado del primer tramo del vano que se coloca sobre el río en el puente atirantado que cruza el río Caudal. La maniobra, que es complicada, se lleva a cabo con la ayuda de tres grúas que soportan hasta un total de  620 toneladas (una de 360 tm y dos de 130 tm). La operación se completa con la colocación de los tirantes y cableados que sirven de sujeción para la estructura. Los trabajos están incluidos en el procedimiento constructivo del puente, que permite realizar las obras sin afectar a la ribera del río.

La previsión es que el segundo y tercer tramo del vano se puedan colocar en los meses de enero y febrero.


Características de la obra
Las obras de construcción de accesos a Soto de Ribera cuentan con un presupuesto cercano a los 7,3 millones de euros (7.291.948,56 euros) para un tramo de 705 metros, (incluidos la totalidad de viales previstos). La empresa  responsable de la actuación es la Unión Temporal de Empresas formada por Corsán-Corviam Construcción S.A. y Sedes S.A, que cuenta con 24 meses para  desarrollar los trabajos.

Se trata de una obra de gran complejidad que pretende mejorar los actuales accesos a la capital del concejo y a la localidad de Vegalencia y así facilitar la conexión de los usuarios de la zona con la actual vía de salida, la carretera N-630. Actualmente, el acceso a Soto de Ribera se realizaba tras atravesar un puente de unos 80 metros, sobre el río Caudal, y un paso a nivel sobre las vías de FEVE; y a Vegalencia, se accedía a  través de una vía sinuosa, tras una intersección con la carretera N-630, en la localidad de Entrepuentes.

El proyecto previsto consiste en la ejecución de una nueva intersección en forma de glorieta en la carretera N-630, una vez pasado el actual puente sobre el río Nalón (en dirección a Mieres). Desde la glorieta partirán dos nuevos viales: uno que forma el nuevo acceso a Soto de Ribera y otro que unirá la glorieta con la carretera a Vegalencia, desde donde también se reubicará el acceso al Picón. El ramal de acceso a Soto de Ribera contará con una longitud de 186,7 metros y discurrirá en recta hasta empalmar con una curva de 50 metros de radio que  conecta con la carretera AS-322.

Como elemento singular de la obra, y  para respetar las características ambientales y técnicas del emplazamiento, se contempla la construcción de un vial que incluirá un viaducto sobre el río Caudal y las vías de FEVE, con tipología de Puente Atirantado. Esta estructura, de 205 metros de longitud, contará con vanos centrales de 93,5 metros y vanos laterales de 9 metros. Se ha optado por este diseño con el fin de cumplir con la Declaración de Impacto Ambiental que establecía la obligatoriedad de permitir la permeabilidad de la fauna asociada a la ribera del río Caudal y la del propio bosque de ribera, impidiendo realizar obras que, una vez concluidas, afectasen directamente a los cauces o a los acuíferos existentes.

La sección transversal de los viales a Soto de Ribera y Vegalencia será la propia de una carretera convencional, con carriles de 3,50 metros de anchura, más sobreanchos en curvas; arcenes de 0,50 metros de anchura; berma en terraplén de 0,50 metros y cuneta bordillo en desmontes. En cuanto a la glorieta, su sección tipo está compuesta por dos carriles de 4,00 metros de anchura, un arcén derecho de 1,50 metros, un arcén izquierdo de 1,00 metros y berma en terraplén de 0,50 metros. La reubicación del acceso al Picón se realizará con una calzada de 4,50 metros de ancho, similar a la actual. En cuanto a la sección tipo de firme, básicamente estará compuesto por zahorras artificiales y mezclas bituminosas en caliente.

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