Los acontecimientos en los mercados financieros de los últimos días ponen de manifiesto la vulnerabilidad de aquellas economías que no han realizado las reformas necesarias para enfrentarse a una crisis de esta naturaleza. Hasta el punto de que, ante la falta de una respuesta adecuada, se está poniendo en cuestión el futuro de la Unión Monetaria Europea.
Ante la gravedad de la situación, los empresarios españoles hacemos un llamamiento a las autoridades españolas y europeas, para que con altura de miras y dejando al margen intereses de corto plazo, adopten y apliquen de forma inmediata las medidas necesarias para reconducir la situación.
España, desafortunadamente no está siendo percibida como un elemento de estabilidad en la Zona Euro. Nuestro país debe dejar de ser parte del problema para ser parte de la solución.
De forma urgente e inaplazable pedimos al Gobierno español que se tomen las siguientes medidas:
- Aprobación de forma inmediata, en el marco del Pacto de Toledo, de una Reforma del Sistema de Pensiones orientada hacia su sostenibilidad a través de los principios de contributividad y mayor equidad en línea con los planteamientos de CEOE en esta materia. Debemos recordar que el Gobierno se comprometió a una reforma del sistema de pensiones que aún no se ha materializado.
- Medidas de control efectivo de las finanzas de las Administraciones Autonómica y Local, de manera que se tenga información en tiempo real y se cierre cualquier posibilidad de desviación presupuestaria. Dicho control debe extenderse también a la deuda con proveedores.
- Debe acelerarse y culminarse con la máxima urgencia el proceso de restructuración y capitalización de una parte del sistema financiero español de forma que no quede duda alguna sobre su solvencia.
- Dada su insuficiencia, se debe profundizar urgentemente en la reforma laboral para solucionar los problemas estructurales y modernizar el mercado laboral español, en línea con la situación de los principales países europeos con los que tenemos que competir. Se debe abordar también la reforma de la negociación colectiva. Junto a lo anterior, las políticas sociales deben incentivar la búsqueda de empleo y mejorar la formación de los trabajadores.
- A semejanza de lo que están haciendo otros países, en las próximas semanas, debe aprobarse por parte del Gobierno un Plan de Restructuración de la Administración Pública que establezca obligaciones exigibles para todas las Administraciones en términos de reducción del gasto corriente, personal dependiente de las Administraciones y reducción de deuda. El plan debe fijar objetivos concretos y hacerse obligatorio para todas las Administraciones a través de la legislación necesaria.
Estas medidas son imprescindibles para sacar a la economía española de la situación de vulnerabilidad en la que se encuentra. Su adopción permitiría ganar el tiempo necesario para realizar las reformas estructurales (educación, sanidad, energía, justicia, cargas administrativas.....) necesarias para superar el déficit de competitividad de la economía española, déficit en el que reside una parte importante de nuestros problemas.
Por su parte, en el ámbito europeo, pedimos la convocatoria urgente del Eurogrupo para que de manera inequívoca reafirme la voluntad política de apoyar sin reservas y con todas sus consecuencias el proyecto de Unión Monetaria.
Para ello, debemos restaurar una estricta disciplina fiscal, con reglas claras y simples que debe cumplir toda la Zona Euro sin excepciones, reforzar la transparencia en las cuentas públicas, definir un sistema de sanciones eficaz, ampliar el alcance de la vigilancia al ámbito de los desequilibrios macroeconómicos y crear un mecanismo equilibrado de resolución de crisis de deuda. Esta es la postura que ha expresado de forma reiterada Businesseurope a las instituciones europeas y que los empresarios españoles apoyamos sin reservas.
De forma paralela, la principal garantía para la Zona Euro es una elevación del crecimiento potencial de todos los países integrados en la moneda común. Por ello, apelamos a todas las instituciones europeas y estados miembro a que hagan realidad los objetivos planteados en la Estrategia 2020. La profundización en el mercado interior, la eliminación de cargas burocráticas innecesarias, la flexibilidad laboral, y sostenibilidad de las políticas sociales y una política medioambiental razonable y consistente con la necesidad de competir en el mercado internacional, deben ser, entre otros, el objetivo fundamental de la legislación europea.
Con estas medidas consideramos que estaremos en disposición de reconducir la situación actual de extrema gravedad en la que nos encontramos y aportar nuestra cuota de estabilidad y credibilidad a la Zona Euro. Las circunstancias exigen acciones decididas, concretas e inmediatas.
Por su parte, en el ámbito europeo, pedimos la convocatoria urgente del Eurogrupo para que de manera inequívoca reafirme la voluntad política de apoyar sin reservas y con todas sus consecuencias el proyecto de Unión Monetaria.
Para ello, debemos restaurar una estricta disciplina fiscal, con reglas claras y simples que debe cumplir toda la Zona Euro sin excepciones, reforzar la transparencia en las cuentas públicas, definir un sistema de sanciones eficaz, ampliar el alcance de la vigilancia al ámbito de los desequilibrios macroeconómicos y crear un mecanismo equilibrado de resolución de crisis de deuda. Esta es la postura que ha expresado de forma reiterada Businesseurope a las instituciones europeas y que los empresarios españoles apoyamos sin reservas.
De forma paralela, la principal garantía para la Zona Euro es una elevación del crecimiento potencial de todos los países integrados en la moneda común. Por ello, apelamos a todas las instituciones europeas y estados miembro a que hagan realidad los objetivos planteados en la Estrategia 2020. La profundización en el mercado interior, la eliminación de cargas burocráticas innecesarias, la flexibilidad laboral, y sostenibilidad de las políticas sociales y una política medioambiental razonable y consistente con la necesidad de competir en el mercado internacional, deben ser, entre otros, el objetivo fundamental de la legislación europea.
Con estas medidas consideramos que estaremos en disposición de reconducir la situación actual de extrema gravedad en la que nos encontramos y aportar nuestra cuota de estabilidad y credibilidad a la Zona Euro. Las circunstancias exigen acciones decididas, concretas e inmediatas.
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